Witchfinder – «S/T» (2017)
Stoner / Sludge / Doom Metal
Desde las tinieblas de Clermont (Francia), nos llega otro misil aire-tierra directo a la superficie del planeta con la única misión de arrasar todo cuanto este a su paso, producto de las ondas expansivas que propagan las fuerzas que esconden el notable debut de estos Witchfinder.
Más propio de una mezcla voraz entre Windhand, Electric Wizard, Monolord o Conan, los músicos del país vecino tienen un alentador arranque con este primer disco de 4 humeantes y fangosas piezas, lista para sacar tu lado más inhumano.
Al talento de este power trío compuesto por Clement (bajo, voz), Tom (batería) y Stan (guitarra), se les une la labor de Maciej Kamuda (Palm Desert, Weedpecker…) con el arte que enfunda su espectacular portada, o las labores de Esben Willems, batería de Monolord, que baja desde las frías tierras del norte para echarle un cable bien gordo a estos músicos franceses con el máster final del redondo y dando como resultado final un producto arrollador, muy idóneo con la propuesta principal de Witchfinder.
Lanzado durante el mes de Mayo en las diferentes plataformas digitales, es nuestro deber ayudarles con un empujoncito en su nueva aventura crowdfunding para su deseo de lanzar este lote de espectrales canciones en ediciones físicas, porque las huestes de Witchfinder y mayormente, el contenido de este álbum, merece estar dando vueltas en los platos de muchos amantes del género.
Con el simple hecho de mencionar a las bandas citadas, sabemos que no estamos ante de nada de nuevo, y decir que es algo repetitivo a lo que hemos escuchado en anteriores ocasiones, tampoco es un punto negativo, ya que aquí estamos con otro ejemplo más de fuerza bruta, contándolo con pelos y señales como si fuera nuestro desvirgar como el primero de ellos.
Nos gusta el stoner, nos gusta el doom, nos gusta aquello que suene lo suficientemente atronador como para que se escuche desde el mismo infierno y Witchfinder son portadores de licenciarse bajo el arco del sonido pesado, con uno de los debut cargados de un malrollismo interior como para dejarte seco en la primera escucha.
Comandado por secciones largas, la pieza más corta son 9 minutos y medio, Witchfinder te abre las puertas de su mazmorra con “Snowy Grave”. Inmensa, perturbadora con esa voz de Clement como si oyeras espíritus del otro lado en ese eco que habita en las grandes fortalezas de siglos anteriores. Witchfinder se engancha rápidamente a la tenebre atmosfera que adopta este debut y que se sirve como su principal arma para atemorizar tus noches de pesadilla.
Dentro de este cuento de lémures con malas intenciones, Witchfinder roba tu inocente alma para enterrarla bajos sus lentos riffs, tirando de la épica del género y esa sensación de estremecimiento que recoge el disco al completo. “Brain’s Flare” entrega casi doce minutos aventureros con apenas unas voces, prácticamente instrumental y ese singular estilo para fusilar con todo ese peso y las herramientas que contiene Witchfinder en todo su esplendor.
Muchas emociones que contar en piezas como “Smoke A Weed Prayer” o su pista final que lleva el nombre de la banda, momentos dónde rendir tributo a los eternos Sabbath y canalizar todo ese hipnotismo dentro de sus paganas funciones para mezclar, en buena forma claro está, los principales fundamentos del género con el amplificado sonido actual.
Todo es distorsión, todo se hace ensordecedor, Witchfinder aturde con las 4 piezas de su debut, únicamente recomendadas para los seguidores de la escuela Wizard o la fuerza bruta de Sleep. Los músicos claman a la audiencia para ese lanzamiento en formato físico que merece salir a la luz. Las innumerables escuchas que le den al disco en sus plataformas digitales, serán únicamente el empuje inexorable que necesites para convencerte una y otra vez, que desde Clermont, ha nacido otra nueva bola de demolición que alimente las fauces del stoner/doom europeo.
