Rompenubes – “II” (2025)

Heavy Psych / Hard Rock / Blues
(Ediciones Insolubles Records)
Lo nuevo del proyecto argentino Rompenubes, llega con algo de receso a nuestro umbral psicodélico, pero señalado en esta jornada de jueves dónde en su mayoría de veces, el galardón del DISCO DE LA SEMANA, se reserva para ese día.
Desde que anunciáramos la creación de este proyecto en la primera etapa de la pandemia (ver aquí), la dilatada reputación de sus músicos se ha hecho dueño de unas composiciones que coquetean entre la elegancia del heavy psych y el progresivo, con una pluma distintiva que hoy viene conformando su segunda entrega desde el formato larga duración.
Miembros de proyectos vecinos y de renombre como son Aeroblues, Tlön, Ambassador, Pappo Blues, Comeflor o Tortuga, se unen en las reminiscencias del rock argentino. Una destreza que deja en su apartado técnico las partes más notables del nuevo “II”.
El blues es siempre el sirope que cubre las composiciones de Rompenubes, una creación cercana a la órbita de los clásicos Aeroblues. Evidentemente, la diferencia de los muchos proyectos de entre sus componentes, adquiere una fusión única para que ese hard rock, gobernando con el trote adictivo y contundente de su apertura “Océanos”, deja un perfecto comité de bienvenida para entender el poderío de Rompenubes.
La magia la desprende un talento al mástil de 6 cuerdas como es Christian Van Lacke, autor de proyectos como Tlön (vienen con nuevo trabajo en este 2025) o Comeflor, con quienes tuvimos el inmenso placer de disfrutar de su homónima obra (reseña aquí).
Ensamblando ideas y colaboraciones varias como las de Pey Etura (guitarra), Pipo Deipenau (trombón) y Natalia Boico (trompeta), cortes como los de “Grito Animal” y “Absenta”, transpiran ese aire caleidoscópico gozando de buenas sintonías y reverberaciones varias dónde fundirnos en el oasis ilustrativo de los Rompenubes más personales y blueseros.
Construcciones como las de “Simple B” tienen en su juego una rítmica formidable impuesto por la veteranía de Rolando Castello y el bajista de Ambassador, Max Álvarez. Minutos espectrales en sus voces con un aura inquietante para volver a sacar a paseo ese factor hipnótico del heavy psych intimidatorio de Rompenubes. “Relojes de Arena” nos devuelve ese chorro Sabbath con algo de oscuridad, mientras que la corta “Megamineros” deja un pasaje robusto liderado por la guitarra de Van Lacke.
Distintas variantes del rock se dan la mano en esta aventura pegadiza y con la firma de unos veteranos del continente sur americano, creando una súper banda de ideas que prosperan en este nuevo “II”, como notable regreso de Rompenubes, tocando con la yema de los dedos el panteón del hard rock setentero, y sus estrechos lazos con el blues.
Editado por Ediciones Insolubles y distribuido por Viajero Inmóvil, puedes hacerte con una copia de este “II” desde aquí.

