La inquietud artística de Primitive Man crece con su oscura obra en “Observance”
Jueves para iniciarlo con una de las bandas más pesadas del planeta, y con más de una década de jerarquía dentro de ese sludge opresivo que hoy viene a presentarnos el quinto capítulo de su discografía, si recurrimos a los trabajos larga duración.
Digo esto en parte porque si hay algo que tiene la poblada carrera de estas moles de Colorado es algunos EP’s y una multitud de divisiones que les ha llevado a trabajar con bandas del calibre de Full Of Hell, Unearthly Trance, Sea Bastard, o los propios Hell, entre muchas otras.
Desde luego, el frontman Ethan Lee McCarthy y los suyos, no han perdido el tiempo y junto con su mano derecha, el bajista Jonathan Campos ha subsistido desde el 2012, como año de su fundación, como la gigantesca sombra de Primitive Man que sigue creciendo en cada lanzamiento.
El nuevo “Observance” vuelve por los fueros de esa presencia dominante de los norteamericanos y por increíble que parezca, cada lanzamiento suyo parezca más pesado que su predecesor.
Únicos e infalibles a la hora de crear una atmosferas literalmente acojonantes, es precisamente desde este apartado dónde la marca de Primitive Man se hace enorme. En ese descenso a la oscuridad, “Observance” lleva esa perspectiva obsesiva increpada por el propio McCarthy. Así lo advirtió en las previas de lanzamiento del disco y definitivamente lo que han creado ha sido uno de sus discos más compactados hasta la fecha.
El sofoco de esta banda, el mismo que he hablado en anteriores lanzamientos, sigue creciendo, haciéndolo más concentrado todo y como siempre bajo esa losa de tiempos lentos distorsionados, adentrándonos cada vez más y más en esa eterna sombra sin luz.
Minutos impactantes como los de “Devotion”, y esa amontonamiento en las losas desperdigadas entre sus muchas capas asfixiantes, un destacamento como es “Transactional” y ese dinamismo a chorros de Primitive Man hurgando dentro de su propia claustrofobia, o el caos que desata la locura de “Natural Law”.
Retorcidos como siempre, asfixiantes como nunca, lo nuevo de Primitive Man, es todo lo que esperas y mucho más. Dentro de ese espeluznante arte se mueve una inquietud aterradora que persiste durante todo el transcurso de “Observance”.
Si hay que decirlo claro, y si somos conocedores del universo que crea esta banda, ”Observance” lleva esa monotonía a una intensidad que se eleva en esta nueva entrega.
