“Ocaso”, libera las cadenas de Bajo Tierra
En la etapa final de la pandemia, uno de los tantos reductos de la amplia escena chilena toco las puertas de esta habitación con su entrega, “Origen” (reseña aquí).
Aquello significaría su estreno desde el formato corto, y el cómo apuntar maneras dentro de una banda con claros símbolos significativos en cuanto a las aguas de las que beben en su composición y un empuje correoso, dentro de ese sector suyo puramente instrumental.
Casi 3 años después, la formación de la localidad de Temuco, se presenta con “Ocaso”, una segunda entrega, también presentada como EP, y 4 nuevas canciones para las masas devoradoras del stoner/doom expansivo.
Los chilenos vuelven a serpentear dentro de ese músculo del rock pesado en algo más de 20 minutos. Su factura pone en liza esa amalgama habitual dentro del fuzz desplegado en “Ocaso”.
Las sombras crecen, las voces desaparecen y las melodías, con cierta nostalgia por muchos de los exponentes escuchados por la vida tanto nuestra como de ellos musicalmente, son testigos de primera fila en esos principales discos que son asiduos en nuestros reproductores y que festejan ese misterio y oscuridad presentados en “Ocaso”.
Con todo esto, y siendo su segunda entrega, Bajo Tierra va perfeccionando su mecánica , llevando ese atractivo perdurable como muchas bandas del universo instrumental y a su vez, marcando esa extraña emotividad de belleza oculta.
Riffs que mueven montañas, que nos enfrascan en esa polvorienta oscuridad que es “Ocaso”, con unos chilenos a un alto nivel propio de llevar esa evolución como banda. Lo que apuntaba maneras en “Origen”, aquí en menos duración definitivamente libera sus cadenas llevando el mejor swing de un fuzz de altos niveles, dentro de esa avalancha stoner/doom de perspectivas que a muchos les puede llevar años atrás, incluso hasta su propia adolescencia.