Sonidos Del Ayer; Black Cobra – “Bestial” (2006)
Sludge Metal
(At a Loss Recordings)
Lo que viene siendo uno de los grandes martillazos registrados en la primera década de este milenio, “Sonidos Del Ayer” se complace en presentar los inicios del dúo de San Francisco, Black Cobra y su apisonadora “Bestial”.
El año 2006, tanto Jason Landria como el percusionista Rafa Martínez, formaron en el 2001 el que posiblemente sea uno de los dúos más incendiarios del sludge norteamericano.
Con un pasado y presente que tanto a un músico o a otro a involucrado con la banda vecina Acid King, Black Cobra abrió su camino un lustro después con su álbum debut “Bestial”. Auténtica crudeza sonora a niveles altísimos de fuzz dentro de unos Black Cobra que el próximo año cumplirán una década de vacío tras su último “Imperium Simulacra” (reseña aquí).
Su vuelta se antoja más y más cada año que pasa, pero el retorno a sus orígenes era nuestro deber en este día para amenizar la jornada del viernes. “Bestial” implora vértigo y masividad a la ecuación, es el primero de un pentateuco del sludge abrasador conformado por Black Cobra en una década exacta, lanzado por el sello At a Loss Recordings.
Realmente, sus dos primeras obras les separan meses de diferencia bajo la dirección del mismo sello, pero “Bestial” era uno de esos descubrimientos que hacía de esta discográfica tan característica en sus bandas más masivas, todo un atropello por parte de este bautizo de unos Black Cobra en ese cruce entre el sludge primitivo y el hardcore punk.
Desde el paso de Martínez por formaciones como 16 o Acid King, hasta la firma destructiva de un Jason Landria que venía del proyecto Cavity. La geografía tampoco les impidió fabricar este primer asalto, Landria era de la costa este de Nueva York, mientras que Rafa estaba en la zona opuesta angelina.
Ya habían apuntado maneras con una demo previa de 3 cortes, “Bestial” es un potente trabajo cargado del lado más visceral de Jason y la impresionante rítmica de Martínez. Puedes ir desde Mastodon hasta High On Fire y pasar por Melvins sin despeinarte encontrándote con muchas similitudes. La voz agónica de Landria se definía con un amasijo de riffs extremo y el poder rítmico de un Martínez intratable.
Entre esa aspereza característica de la banda y los sonidos valvulares perpetrados en sus muchas descargas masivas, la furia se libera en “Bestial”, un disco que no deja de tener esa reminiscencia noise en muchos tramos, pero su devastadora pesadez es la que golpea con fuerza uno de esos clásicos de puro músculo, vértigo y muchísimo fuzz implantado en todo un asedio de riffs que no hace prisioneros.
