Sautrus – «Anthony Hill» (2017)
Después de un año como el del 2014 dónde tuvimos la oportunidad de escuchar el prometedor arranque que tuvo dentro de la escena de la comunidad arenosa la banda polaca Sautrus con aquel “Reed: Chapter One” (reseña aquí), en este primaveral mes de Mayo llega la continuación de estos músicos de la gran urbe de Tricity, bajo el nombre de “Anthony Hill”.
Sautrus son otra de esas bandas que vigorizan la robusta prole de bandas de la factoría alemana Pink Tank Records, culpables en mayor manera de mucha de la actividad del underground centroeuropeo para la corporación del sonido pesado. Este “Anthony Hill” resulta ser otro de los lanzamientos más cautivadores para disfrutar de lo que nos propone el sello de Hamburgo en estos días de florecimiento estacional. Y qué mejor que mezclar a ese jardín de colores con una vuelta como la de Sautrus, dónde ese stoner peliagudo que apostaban en su álbum debut, aquí queda apartado a un lado para adoptar un nuevo inciso en el páramo progresivo sin olvidarse de las ejecuciones al buen riff.
Es verdad que “Anthony Hill” no ganará el premio al mejor artwork del 2017, de mirar por los puntos negativos al disco, creo que todas las miradas se dirigirán al arte que nos lleva como portada. Lo que de verdad interesa es el contenido que lleva dentro, con sus siete nuevas piezas, una más que las que traía su álbum debut, y un tanto más largo, arriesgando más dentro de un campo que a priori, se presenta más complejo pero ambicioso a la hora de mostrar los ideales de todos y cada uno de sus componentes.
De esto fuimos conscientes en una pieza como “Sypnoticon”, el primer single que lanzaron en su campaña de promoción y también de las piezas más largas de este segundo LP. Desde sus inicios podemos ver una mezcla perfecta entre lo mejor de Pink Floyd y Mastodon. Esto, en principio, parece complicado de lograr pero créanme que Sautrus lo implora como tónica general del álbum llevando ese conjunto a la suma de pasajes ambientales, dónde las atmosferas que presenta la banda se enriquecen de finas texturas en muchos momentos del álbum.
“The Way” o “Good Mourning” nos aclimatan dentro de esta nueva nube gaseosa que cubre “Anthony Hill”, con la notable voz de Weno Winter rodeado de un manto de fuzz, psicodelia y rock pesado con oscilación graduada dentro de las muchas visiones atávicas y la contigua estampa entre intensidad y melodías, caracterizada por mejores riffs que obtiene “The Fungus”, posiblemente la más adictiva de “Anthony Hill”.
La segunda cara del disco se determina por piezas acústicas que elevan la calidad del álbum y ese despunte con la pieza más larga llamada “Shotgun”, probablemente la mejor versión de creer en el avance que han dado los músicos polacos en esta nueva aventura suya con la mejor de las combinaciones entre la potencia de su álbum debut, con las innovaciones de este segundo redondo.
“Anthony Hill” es un notable avance en la cruzada de estos Sautrus, que llena aún más de matices su estilo musical recalcado en ese stoner progresivo de su “Reed: Chapter One” y llevado con una cualidad mucho más fina, una producción más refinada y el suave tacto de sus componentes, a quiénes se superan en sus expectativas a la hora de entrar en comparativas entre ambos discos cosechados hasta la fecha.
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